ATTAC en el estado español lleva tiempo muy preocupado observando la lectura exclusivamente liberal del análisis de la crisis en el Reino de España por parte del Gobierno, pero también proponiendo medidas alternativas al objeto de enfocar las posibles salidas desde posiciones sociales respetuosas con el sector público y los servicios públicos, la protección social y ambiental, y la exigencia de avanzar en el terreno de la justicia fiscal y la redistribución de la riqueza.
En primer lugar, ATTAC tiene muy claro que la crisis es sistémica, es decir del capitalismo, y que éste padece una grave enfermedad incurable, pero en esta agonía -que puede ser muy larga- hay que proponer medidas que avancen hacia la democracia real y no solo formal, fortaleciendo los medios del estado frente a especuladores financieros de todo tipo y condición.
En segundo lugar, denunciamos las presiones intolerables de los financieros internacionales y directivos de las grandes transnacionales, incluidas las bancarias, que a traves de sus clubes de influencia y dominación están extorsionando al Estado Español y su gobierno, con la amenaza de las agencias de calificación de “seguridad” financiera y solvencia económica, que de forma escandalosa y sin tapujos se han producido en el Foro Económico de Davos y se siguen produciendo. El brutal ataque especulativo que está sufriendo la deuda pública española por parte de los grandes jugadores del casino mundial, no hace sino reforzar las propuestas de ATTAC de controlar los mercados de capitales e implantar con urgencia un impuesto global sobre las transacciones financieras.
Estas mismas agencias y estos mismos agentes son los creadores de las burbujas inmobiliaria y financiera que ha hecho reventar la actual fase de la crisis. Estos expertos, que no fueron capaces de predecirla y con sus decisiones han arrojado al paro y el empobrecimiento a millones y millones de mujeres y hombres asalariados, pero también a millones de autónomos y pequeños empresarios y empresarias, pretenden aprovechar la coyuntura de incertidumbre para hacer que se olvide su actuación y dar otra vuelta de tuerca a su estrategia de desmontar la protección social, haciendo aparecer a las políticas sociales como las responsables del retraso de la recuperación económica, sustituyendo a los gobiernos elegidos por los ciudadanos por una cofradía de pretendidos sabios neoliberales, por encima de la gestión pública de los asuntos comunes, es decir de la política. Es decir, la romería de fracasadas y fracasados de Davos que tanto daño le han producido y producen a la humanidad, está ahora imponiendo al Gobierno de España su agenda, con la inestimable colaboración del Banco de España, la CEOE, los “expertos” y secretarios de estado neoliberales del Gobierno y la derecha política y social.
En tercer lugar, la agenda ortodoxa y neoclásica adoptada por el Gobierno de España, de cuajar, reducirá los derechos sociales de las clases populares, empeorará las condiciones de jubilación y debilitará el carácter público y universal de los sistemas de protección social. Además estas premisas están defendiéndose entre la ciudadanía mediante falacias y datos que no respetan la verdad y además introducen el miedo al futuro a personas ya angustiadas por sus empleos, ingresos familiares e hipotecas y deudas.
Ante ésto ATTAC España, gracias a los y las economistas y sociólogos ligados a su Comité Científico, hará público en breve un trabajo sobre las pensiones que contendrá análisis y propuestas científicamente contrastadas, y sobre todo socialmente avanzadas y justas.
En cuarto lugar, se está cayendo en la típica-tópica salida a las crisis cíclicas del capital, apoyando medidas puramente monetaristas y clásicas -es decir NEOLIBERALES-, haciendo caer el peso de las cargas y sacrificios personales sobre los trabajadores, asalariadas, pymes y economía social, reduciendo sus derechos, empleos, garantías y protección, mientras que se subvencionan a bancos y grandes empresas en cuantías muy importantes, y se habla de reducir una vez más el maltrecho sector público en beneficio de los grandes negocios privados.
El Gobierno cede ante la derecha española y ejecuta su programa, mientras ésta se permite pedirle aún más y encima burlarse de sus decisiones, forzando la puesta en marcha ya de su agenda oculta.
ATTAC España es consciente de la necesidad de presionar al Gobierno, pero también a los poderes financieros, gran empresariales y de los centros de poder real, mediante información, movilizaciones y protestas de las y los ciudadanos, las clases trabajadoras y los sindicatos, movimientos sociales y colectivos autoorganizados, pero también mediante experiencias alternativas y participativas.
ATTAC España exige el fin de las SICAV, el fraude fiscal y la economía sumergida, y el nuevo trabajo esclavo y precario; la creación de un sistema financiero público, y la no privatización de las cajas de ahorros, al revés, hacer de ellas organismos que cumplan sus funciones sociales y ligados a los territorios.
ATTAC España pide a los sindicatos que ejerzan su papel de defender y organizar a los trabajadores y trabajadoras buscando alianzas entre todos ellos, los llamados mayoritarios y los territoriales o muy asentados en sectores profesionales y laborales concretos, con espíritu de clase y presionando con decisión al Gobierno, pero también a la CEOE.
ATTAC España, ante el semestre de presidencia española, denuncia que la Unión Europea que se ha construido es únicamente un gran mercado, regido por la doctrina neoliberal y cuyas directivas y reglamentos atacan de raíz a los derechos sociales de europeas y europeos, fomentan la desigualdad y favorecen a las transnacionales, obligando a los estados miembros a privatizar en su beneficio toda la actividad económica, de servicios y cultural.
No entendemos como el acervo legislativo europeo, impuesto por una Europa mayoritariamente derechista, conservadora y neoliberal, es aceptado sin rechistar por el Gobierno Español, máxime cuando tanto el Parlamento Europeo como los gobiernos nacionales -y por ello el Colegio de Comisarios y la Presidencia- están en manos de la derecha europea, y por tanto su inspiración y espíritu legislativo es profundamente derechista. Las leyes y la economía sí tienen ideología, diremos más, en la orientación económica y del presupuesto está ahora claramente demostrada la deriva ideológica de sus inspiradores.
ATTAC España cree que sólo la movilización ciudadana y trabajadora, constituidas como sujeto político, puede cambiar esta situación.